Imagen: Yedro mostrando algunas de sus heridas.
El 18 de febrero de 2010- una patota
enviada por el máximo dirigente de la UOCRA, Gerardo Martínez, atacó a Luis
Yedro y Hernán “Colo” Fernández, quienes terminaron hospitalizados. Los
agredidos estaban trabajando en ATUCHA II dentro del almacén de la empresa
Na-Sa, justo al frente de la oficina gremial de TECHINT.
Meses antes de la agresión, otra patota de Gerardo
Martínez había irrumpido en una asamblea de obra de Lomas de Zamora, donde
golpeó salvajemente a nuestro compañero Carlos Olivera, a quien le inventaron
una causa penal, debido a la cual aún está detenido.
A pesar de la agresión, que ocurrió bajo la
atenta mirada de Gendarmería y la seguridad privada de la empresa (que
liberaron la zona) y de que ambos compañeros eran candidatos de la Lista
Naranja en las elecciones seccionales, luego del ataque continuó la persecución
patronal. Al Colo lo echaron unos días después y a Luis lo siguieron
intimidando.
El ensañamiento contra los compañeros se debe
a que expresaron, como candidatos de la oposición, el sentimiento mayoritario
de los trabajadores de la construcción, exigiéndole al sindicato que los
representa que se ponga firme frente a los despidos, que lamentablemente continuaron
durante estos dos años.
Las causas de Yedro y el Colo están en
radicadas en la fiscalía de Zárate. Y si bien el expediente ha engordado
considerablemente, la patota continúa actuando como si nada hubiera pasado. Tal
es así que varios de los personajes que fueron denunciados se pasean dentro de
la obra vistiendo la ropa de alguna de sus empresas.
Los organismos de derechos humanos, los
sindicatos y los cuerpos de delegados combativos y todas las organizaciones y
personalidades que se consideren democráticas deben tomar en sus manos esta
trascendental pelea por juzgar y castigar a los pistoleros que golpearon a los
compañeros. Si se gana no sólo beneficiará a los trabajadores de Atucha II,
sino al conjunto de los obreros y empleados de la construcción.
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